Mostrando las entradas con la etiqueta riesgo. Mostrar todas las entradas
Mostrando las entradas con la etiqueta riesgo. Mostrar todas las entradas

martes, marzo 28, 2017

La vida es tiempo, quien te roba el tiempo te roba la vida


Así es,  la vida es tiempo y quien nos roba el tiempo nos roba la vida, y pasa que muchas  veces somos nosotros mismos quienes nos robamos la vida. La desperdiciamos  cuando nos  quedamos en una relación, en un trabajo, en un proyecto que no tiene futuro. De manera tozuda continuamos allí invirtiendo energía, recursos, vida.

El deseo que nos habita es un indicador de la frecuencia que vibra en ese espacio relacional, laboral, proyectivo. Nos permite desdibujar la imagen de la lontananza la inevitable verdad insoslayable a la cual irremediablemente nos enfrentaremos, la finitud. 

Seguir leyendo: http://lmhoyosduque.com/la-vida-tiempo-quien-te-roba-tiempo-te-roba-la-vida/

lunes, marzo 27, 2017

El amor siempre está en riesgo








Seguramente alguna vez te has hecho esta pregunta de manera consciente, o de forma inconsciente has sentido un deseo palpitando en tu corazón, cuál es el secreto, la piedra filosofal que me permita conservar la inmortalidad de esta relación de amor, lo puedes aplicar a la pareja y a todo tipo de relación.  

Si alguna vez te has preguntado y si no lo has hecho, lo primero que necesitas saber es que el amor siempre está en riesgo.

¿Y por qué el amor siempre está en riesgo? Porque  cuando asumes que llegaste, que no hay nada que perder te relajas y te olvidas de esos pequeños grandes detalles que hacen la diferencia, olvidas esos gestos y comportamientos que hicieron que el otro se enamorara de ti.

Seguir leyendo http://lmhoyosduque.com/amor-siempre-esta-riesgo/

jueves, enero 21, 2016

ATRÉVETE A SER VERAZ- OSHO


Ninguna relación  puede florecer realmente si te reprimes. Si te proteges, si te escudas, solo llegan a encontrarse las personalidades, y el centro, lo esencial, se queda a solas. Y entonces solo tu máscara relaciona, no tú. Siempre que esto ocurre, en la relación hay cuatro personas, no dos. Dos personas falsas que se ven, y las dos personas reales cuyos mundos están completamente separados.

Ahí está el riesgo: si eres veraz, nadie sabe si tu relación será capaz de comprender la verdad, la autenticidad, si la relación podrá soportar la

tormenta. Existe un riesgo, y por eso la mayoría de las personas actúa con suma precaución. Dicen las cosas que deben decirse, hacen lo que debe hacerse, y el amor se convierte casi en una obligación.

Pero entonces la realidad sigue hambrienta, y no se sacia la esencia, que es cada día más triste. Las mentiras de la personalidad son una carga muy pesada para la esencia, para el alma. Existe un riesgo real y ninguna garantía, pero merece la pena correr ese riesgo.

Como máximo, lo que puede ocurrir es que se rompa la relación, pero más vale separarse y ser reales que seguir juntos e irreales, porque no resultará satisfactorio.

De la relación nunca surgirá la dicha. Seguirás sintiendo hambre y sed, arrastrándote, esperando el momento en que se produzca el milagro. Para que se produzca el milagro tienes que hacer algo: empezar a ser veraz. Incluso corriendo el riesgo de que la relación no sea suficientemente sólida y no puedas soportarla —la verdad puede resultar excesiva, insufrible—, porque entonces la relación no merece la pena. Y hay que pasar la prueba.

Arriésgalo todo por la verdad, porque en otro caso siempre te sentirás insatisfecho.

Harás muchas cosas, pero en realidad no te pasará nada. Te moverás mucho, pero no llegarás a ninguna parte.

Todo será absurdo, como si tienes hambre y solo fantaseas con la comida, una comida maravillosa, deliciosa. Pero la fantasía es la fantasía, no es real.

No puedes comer comida irreal. Puedes engañarte en ciertos momentos, vivir en un mundo de sueños, pero un sueño no te dará nada. Te arrebatará muchas cosas y no te dará nada a cambio. 


Intimidad - Osho