martes, mayo 24, 2016

Por un instante detente


Sólo por un instante detente. Por un breve instante para toda actividad, cierra tus ojos, observate y entra en la quietud.

Percibe tu respiración, sin controlarla, date cuenta de lo que sucede. Estate allí, contigo sólo por uno, dos o tres minutos.



Observa, siente lo que pasa. Un flujo de serenidad y paz te envuelve.

Sólo hazlo.

No hay comentarios.: