martes, septiembre 29, 2009

¿FRIGIDEZ? AUSENCIA DE DESEO SEXUAL FEMENINO



Existe la falsa creencia de que la mujer que no tiene orgasmos es frígida, no es así, el no tener orgasmos no implica que no haya deseo, o que todo el aparato genital femenino no participe en el acto sexual con el correspondiente sentir excitativo. No hay orgasmo pero sí deseo y excitación.

La frigidez es la falta de deseo sexual en la mujer, puede ser absoluta o periódica. Puede deberse al el estrés, las afujías económicas, laborales, o alguna otra preocupación de otro orden que ocupe la atención de la mujer, toda su energía libidinal la focaliza en estas problemáticas y se desconecta de su sexualidad. Es decir no siente deseo, por supuesto no hay excitación, ni orgasmo.

Existen otras variables que promueven la falta de deseo tales como una educación en la infancia rigurosa llena de paradigmas, normas religiosas que privan a la mujer de sentir el placer sexual. También puede creer que sólo el hombre tiene derecho al placer ella solo está para traer hijos al mundo. La causa de la ausencia de deseo también se encuentra en una violación, o una experiencia previa insatisfactoria.

La sexualidad se conecta con la psiquis, la emoción, la formación, la natural vivencia sexual de cada individuo, salir de la cárcel de la inhibición con ayuda terapéutica es posible. Es viable romper las cadenas que bloquean la sexualidad, derribar los muros de los paradigmas y los temores insensatos que impiden la conexión con la plena sexualidad.

miércoles, septiembre 16, 2009

¿FOBIA SOCIAL?



Existen dos tipos de fobia social: Generalizada: Cuando los temores se relacionan con la mayoría de las situaciones sociales y Focalizada cuando el temor se presenta en situaciones especificas.
Afecta al 2% de la población y se da con la misma probabilidad en hombres que mujeres.

Independientemente de su origen en los trastornos de ansiedad, son nuestras propias conductas, nuestras evitaciones, las que mantienen el problema.
No es lo mismo padecer de fobia social que timidez. La diferencia clínica está en el impacto que tiene en la vida de la persona. En la fobia social la vida personal y laboral está gravemente afectada. El tímido asiste a los encuentros en los que se siente incómodo, con miedo, pero asiste. Al hacerlo constantemente, se habitúa y los contextos se le hacen más llevaderos. Quien sufre fobia social evita las situaciones de manera consistente o si acude se preocupa más por tratar de estar sereno y vigilar su ansiedad que de tener puestos los cinco sentidos, participar o hacer lo que tiene que hacer en ese contexto.

Los pensamientos que afluyen cuando se tiene fobia social están relacionados con: “van a notar mis nervios” “Me pondré colorado” “Voy a temblar” “Mi voz va a temblar. “Mi voz va saldrá débil”. “No tendré un buen desempeño, me quedaré en blanco, me voy bloquear” “aburriré a todos”. “Se sentirán incómodos conmigo” “pareceré tonto” “No se me ocurre nada interesante, van a pensar que soy un aburrido”“Van a pensar que estoy mirando donde no es correcto” “Tendré un gesto extraño”.
Con estos pensamientos y de forma maquinal, surgen los intentos por controlar los nervios, se quiere controlar el rubor, el gesto, el temblor, la voz, la mirada, la mente para ser ocurrentes y espontáneos, el gesto. Controlar reacciones automáticas de imposible, o muy difícil, control consciente, lo que se consigue es agravar el problema:

El temblor aumenta por la tensión muscular que se hace para no temblar.
La voz sale rara no espontánea fruto del hiper- control. El control de la voz censura, no permite pensar.
Es imposible controlar mirada totalmente. Al mirar un punto podemos somos conscientes de todo nuestro campo de visión, y entra seguramente lo que no queremos mirar.
Al hablar lo hacemos conscientemente, pero las palabras fluyen automáticamente, al concéntranos en buscar algo que decir, perdemos el hilo de la conversación y, cuando se nos ocurre algo que decir, ya no es conveniente o no es adecuado y lo censuramos y nos callamos; pero al permanecer en silencio podemos parecer sosos. ¡Es una trampa infernal!
Se pierde la espontaneidad al controlar el gesto.

Tratamiento de la fobia social

Protocolo terapia de aceptación y compromiso

1. Valores
Uno de los valores fundamentales que tienen las personas con fobia social son las relaciones sociales. Si no fuera así, su sufrimiento sería mucho menor.

2. Determinación
Analizar la huída frente al enfrentamiento a las situaciones temidas ayuda a darse cuenta de las diferencias de sentimientos que deja la actitud de enfrentarnos a las situaciones luchando por aquello que deseamos, frente a la actitud asociada a la evitación. De esta forma podemos llegar a tomar la determinación de llegar a aceptar la ansiedad que tememos, porque sentiremos y sabremos que es mejor que evitarla.

3. Aceptación
Si merece la pena enfrentarse a las situaciones temidas por mucho miedo que pasemos, es conveniente saber cómo se vencen los miedos. Los miedos se superan enfrentándose a ellos no evitándolos. En la fobia social, no basta con acudir a las situaciones en las que se sufre la ansiedad, porque en ellas también se están dando respuestas de evitación, por ejemplo, no se mira a la cara, no se habla, se busca de forma insistente algo que decir, se disimula, etc.


4. Vivir el presente

La mente nos dice que no vamos a poder aceptar lo que nos va a venir en las situaciones tremendas que tanto tememos, le hemos de contestar que puede que sea cierto, ahora bien, vamos a aceptar lo que sentimos en ese momento. Estamos dispuestos a todo; pero centrados en el presente, cada cosa a su tiempo, el futuro nos vencerá; pero lo que tengo que enfrentar ahora es lo que siento en este momento. Cuando llegue la tremenda catástrofe la voy a enfrentar con determinación;… cuando llegue, ahora aceptamos lo que estamos sintiendo ahora. Aprendes a vivir el presente.

5. Desactivación del pensamiento
Nuestro pensamiento nos lleva a un futuro incierto e imposible y nos dice que ya, ahora mismo, hemos de hacer todo lo que esté en nuestras manos para superarlo. En la fobia social predice que nos vamos a poner nerviosos y que se nos va a notar. Cuando pensamos en una sensación concreta la potenciamos, aumentamos su probabilidad, como se demuestra en el experimento del limón. No podemos dejar de pensar consciente y voluntariamente en lo que no queremos pensar. La solución pasa por aceptar el pensamiento y desactivarlo, es decir, ser conscientes de lo que estamos pensando, dejar que el pensamiento esté ahí sin discusión; pero no haciendo lo que nos dice. En el caso de la fobia social, se trata de tener el pensamiento de que nos van a rechazar, aceptarlo con sus consecuencias, es decir, con el miedo y la ansiedad que nos provoca y hacer lo que realmente nos importa: la acción comprometida con nuestros valores y objetivos.

6. Descubrir el YO
El auto concepto lo construimos en la interacción con los demás. Por eso, uno de los efectos más devastadores de la fobia social es que al seguir los impulsos de evitación que genera el miedo en las situaciones sociales no nos dejará ser nosotros mismos al no mostrar nuestros pensamientos, sentimientos, sensaciones y emociones a los demás. Cuando no los mostramos, la imagen social está distorsionada y el concepto que tenemos de nosotros mismos, finalmente, se deteriorará.
Atreverse a ser uno mismo, a decir lo que se quiere decir en la situación o callarse cuando no hay nada que decir, es difícil. Nos tenemos que arriesgar al rechazo, a quedar mal delante de las personas más significativas a que se nos note débiles, tontos, incapaces, etc.

Merece la pena sentir la ansiedad que sea precisa. Entrenarnos en hacer contacto con nuestro yo profundo, verificar que somos los mismos mientras mis circunstancias, mis pensamientos, sentimientos sensaciones y emociones cambian,un camino expedito para ser asertivos.

martes, septiembre 15, 2009

¿MIEDO A ENVEJECER?




Si tienes miedo a envejecer no estás solo, una sobrina de 11 años me confesó hace
poco que estaba aterrorizada porque se imaginaba viejita, enferma y sola. Al miedo a envejecer se denomina gerascofobia, es normal que lo sientan casi todas las personas cuando el calendario va marcando el ascenso inexorable. No hay una edad determinada en la cual se pueda precisar la aparición de esta fobia, es muy común cerca de los cuarenta años cuando se empiezan a notar las mayores transformaciones del cuerpo. Las huellas del tiempo se hacen visibles, se recurre a cirugías, cremas y tratamientos estéticos alternos a fin de suavizar las pisadas del almanaque. Esto es normal.

La gerascofobia es el miedo irracional a envejecer, un constante, anormal y absurdo miedo a estar viejo. Tal como lo describía mi sobrina tía tengo terror a envejecer a estar viejita y a morirme.

Causas:

Las causas de la gerascofobia son diversas, veamos algunas:

Sentir que no se ha cumplido la misión propuesta o la que el entorno familiar ha dictado.
Sentir insatisfacción con el logro de las aspiraciones alcanzadas: relación de pareja estable, hijos, status económico.
No tener reconocimiento o éxito social, fama.
Tendencia particular a sufrir fobias, individuos temerosos en otros aspectos de la vida.

Mediante la hipnosis es posible derrotar los miedos, también la gerascofobia. Controlar el tiempo es un imposible metafísico. El pasado es historia, el futuro una ilusión que no sabemos si llegará, la única realidad es el presente y te la estás perdiendo.

La muerte hace parte de un proceso natural, a través de la terapia logras hacer contacto con la realidad, cambiar de foco de atención para sacar adelante los proyectos atascados por el miedo que te ha tenido paralizado durante años.

Luz Marina Hoyos Duque

Medellín, septiembre 15 de 2009

lunes, septiembre 14, 2009

¿FOBIA A LAS ALTURAS?

Al miedo a las alturas se le conoce como acrofobia, la persona que lo padece siente un miedo irracional e irrefrenable a todo lugar que se encuentre a una suficiente altura como para disparar su miedo. Solo con la idea o posibilidad de encontrarse en un lugar alto, puede disparar los síntomas fóbicos, no requiere estar en un lugar alto, el simple imaginario de estar allí desencadena los síntomas. Trátese de azotea, mirador, ventanal o abismo, ir en un elevador que tenga perspectiva hacia abajo mientras se asciende, etc. Estas situaciones producen intensa ansiedad provocada por el miedo. Quien padece esta fobia tiende a evitar todo tipo de lugares que tenga estas características.

A través de la hipnosis clínica aprendes un método de respiración y relajación, técnicas de habituación, con las que aprenderás a enfrentar los estímulos fóbicos, podrás enfrentar estos lugares, mediante la exposición gradual, logrando la habituación y el re aprendizaje. Lograrás controlar tu miedo a voluntad, y superar el condicionamiento que te hace sentir el terror (la fobia) a las alturas, que hoy te impiden visitar y disfrutar diversos lugares del mundo que por sus características disparan tu fobia.
Aprende a relajarte, conéctate con tu verdadera naturaleza y maneja de forma armónica mente, cuerpo y espíritu.

La desensibilización sistemática (DS) fue desarrollada por Wolpe (1958).

Es una técnica dirigida a reducir las respuestas de ansiedad y a eliminar las conductas motoras de evitación, considera que: La aparición de determinadas situaciones, genera de forma automática respuestas de ansiedad. Un procedimiento adecuado debe posibilitar que se provoque, también de manera automática, la aparición de respuestas incompatibles con la ansiedad, cuando se presenten esas situaciones, de modo que se impide que se desarrolle la ansiedad y que se pongan en marcha las conductas de evitación.


MODELOS TEÓRICOS EXPLICATIVOS

No está claro el proceso a través del cual la DS logra sus resultados.

Existen varios modelos teóricos explicativos.

INHIBICIÓN RECÍPROCA Y CONTRACONDICIONAMIENTO

Para Wolpe, los procesos de inhibición recíproca y de contracondicionamiento, son los responsables de los efectos de la DS:
• Inhibición recíproca: En presencia de una respuesta incompatible (con la ansiedad), el estímulo ansiógeno, no puede provocar ansiedad.
• Contracondicionamiento: El que el estímulo ansiógeno se asocie a una respuesta incompatible, facilita el condicionamiento de una respuesta contraria a la ansiedad, es decir, el desarrollo de un proceso de contracondicionamiento.
Pero, en algunos casos se consiguen resultados sin respuesta incompatible o con una muy poco intensa: Necesidad de explicaciones alternativas.

MODELO DE VAN EGEREN

Se pueden implicar 4 procesos que se diferenciarían según su ubicación respecto a 2 ejes dimensionales:
1. Si la actuación tienen efecto a largo plazo (implica aprendizaje) o a corto plazo (no implica aprendizaje).
2. Si la actuación implica o no inhibición antagónica (si se debe o no al efecto inhibidor de una respuesta sobre la ansiedad).
Conviene insistir en una mayor duración en la presentación del estímulo para facilitar el desarrollo de los procesos de habituación y de extinción:
• La exposición más prolongada facilitaría una habituación más rápida.
• Al desarrollarse más tiempo la habituación, se facilitaría una más rápida extinción.

ASPECTOS DE CONDICIONAMIENTO OPERANTE Y MODELADO

Refuerzo operante: Reforzar al cliente por ir realizando las conductas motoras que antes evitaba (a las que está siendo sensibilizado), colabora y acelera la eficacia de la DS, facilitando el aumento del contacto con el estímulo y reduciendo la respuesta de evitación.

Además, produce una "prueba de realidad", por la que el cliente constata que no van a seguir a dichos estímulos consecuencias aversivas, y también favorece el desarrollo de estrategias de afrontamiento.

Modelado: El cliente puede observar a otras personas actuando como modelos al llevar a cabo las conductas que él debe emitir, lo que aumenta la eficacia de la DS.

El reforzamiento social por llevar a cabo esas conductas, también contribuye a la eficacia de la DS.

ASPECTOS COGNITIVOS

Se ha señalado la importancia de diversos aspectos cognitivos en la DS:
• El curso y la calidad de la imaginación.
• Aspectos de condicionamiento semántico.
• Expectativas de mejora.
• Posible reestructuración de las cogniciones de los pacientes.
• Cambios en los niveles de autoeficacia.
• Valor de la DS como estrategia de afrontamiento.
• Efectos placebo de la DS.
Emmelkamp, propone un modelo cognitivo de expectación, para explicar la importancia de los aspectos cognitivos en la DS, y en los tratamientos de ansiedad en general.

Las 2 variables importantes son:
1. La autoobservación de la mejoría por el propio cliente.
2. La creación de expectativas de que va a conseguir ganancias terapéuticas.
Al producirse repetidas presentaciones imaginarias del estímulo, se facilita la habituación. Se reduce la ansiedad ante la presentación imaginaria, lo que facilita la creación de expectativas de mejoría y empuja al paciente a comprobar si estos efectos se dan ante estímulos reales.

Si se constata una disminución de la ansiedad ante los estímulos reales, se facilita la habituación in vivo, lo que incrementa los efectos anteriores.

Además, la auto observación del cambio in vivo, facilita la aparición de una reestructuración cognitiva que se traduce en una mejoría para afrontar las situaciones problema y una disminución de las respuestas de ansiedad.

El usar DS en vivo o DS en imaginación, vendría determinado por el tipo de problema y por la capacidad del procedimiento para facilitar el desarrollo de éstos aspectos cognitivos:
• DS-I: Si el problema implica aspectos como rumiaciones cognitivas o se refiere a situaciones no reproducibles (miedo a las tormentas).
• DS-V: Si en el problema se implican aspectos de actuación.
Todos estos modelos explicativos no son incompatibles sino complementarios. Pero, es posible que en las distintas situaciones se impliquen de manera más importante unos que otros.

CONDICIONES DE APLICACIÓN DE LA DS

La DS es un tratamiento adecuado siempre que ocurran las siguientes condiciones:
1. El miedo y la ansiedad del sujeto no están justificados por creencias o ideas sobrevaloradas, fuertemente asentadas. En estos casos, se han de aplicar técnicas que modifiquen éstas creencias antes de la DS.
2. El miedo y la ansiedad del sujeto es irracional, ya que el sujeto posee las habilidades requeridas para hacer frente a la situación o no existe objetivamente un peligro.
3. El cliente presenta un número de fobias reducido, inferior a 4, así como no presenta ansiedad generalizada alta. En trastornos como agorafobia (con o sin trastornos de pánico), y trastornos obsesivos, la DS no resultará efectiva.
La DS está fundamentalmente indicada en casos de miedos y trastornos fóbicos que supongan la participación de estímulos condicionados en el mantenimiento del problema, como pueden ser: disfunciones sexuales, parafilias, asma, insomnio, alcoholismo, y otras adicciones, etc.

lunes, septiembre 07, 2009

EFICACIA DE LA HIPNOSIS CLÍNICA: RESUMEN DE SU EVIDENCIA EMPÍRICA

fecha de publicación 02/09/2009 6:00:00
ISSN 1886-1385 © INFOCOP ONLINE 2007

Mª Elena Mendoza y Antonio Capafons
Universidad de Valencia

La hipnosis clínica es una intervención valiosa en el tratamiento de una amplia variedad de problemas psicológicos y médicos, ayudando a la mejora de la calidad de vida de muchos pacientes. La investigación indica que, cuando se la utiliza como coadyuvante a otras intervenciones médico-psicológicas, incrementa la eficacia y/o eficiencia de tales intervenciones. Asimismo, la hipnosis aplicada se usa en otros ámbitos (deporte, Psicología forense, hábitos de estudio y concentración, etc.), si bien estas áreas de intervención han recibido poca atención por parte de los investigadores, por lo que, en este artículo, nos centramos sólo en la hipnosis clínica. Finalmente, conviene recordar que la hipnosis no es sólo un conjunto de procedimientos aplicados, sino además, un campo de estudio que cuenta con una gran cantidad de investigación teórica y experimental, con implicaciones en varias áreas centrales de la Psicología y Medicina, como la percepción, memoria, neurociencia, etc.
Una revisión actualizada y exhaustiva del estado de la evidencia empírica de la eficacia de la hipnosis clínica, basada en los criterios metodológicos más estrictos, permite concluir que los procedimientos hipnóticos se consideran como eficaces y tratamiento bien establecido en el manejo del dolor, y eficaces para elementos emocionales del asma; probablemente eficaces en el tratamiento coadyuvante de la depresión, la ansiedad, de ciertos trastornos del sueño, en la reducción del peso, en el tratamiento del tabaquismo, el asma, la enuresis en niños y la preparación a la cirugía, aunque en este último caso, la evidencia acumulada la aproxima con mayor claridad a tratamiento eficaz.
En otras áreas, como el tratamiento del colon irritable, no hay estudios que cumplan los criterios metodológicos más rigurosos para concluir que es un procedimiento posiblemente eficaz. En oncología existen resultados clínicos prometedores, especialmente para reducir vómitos provocados por la quimioterapia, el dolor y la medicación analgésica, aunque es necesario realizar más estudios controlados.  
En odontología, dermatología, otorrinolaringología e inmunología no se han encontrado estudios concluyentes. En el caso de la pediatría, exceptuando la enuresis nocturna, donde es posiblemente eficaz, la mayoría de la investigación publicada se basa en estudios de caso y de grupos pequeños con diseños no controlados, que cumplen la función de indicar las áreas relevantes de estudio de la investigación futura. Teniendo en cuenta el amplio rango de aplicaciones posibles en pediatría, y la gran cantidad de buenos resultados existentes en la literatura, se puede considerar que la investigación de la eficacia de la hipnosis en la infancia está en pleno desarrollo.
Por todo ello, es necesaria la realización de investigación con muestras más grandes y diseños experimentales mejorados para el establecimiento de la eficacia de la hipnosis clínica en aquellas áreas donde los indicios son prometedores, y en otras donde la evidencia de la eficacia de la hipnosis aplicada se basa más en la experiencia personal, como, por ejemplo, la Sexología, Psicología del Deporte, Pedagogía, etc.
Es importante destacar que en las investigaciones se ha aplicado la hipnosis, bien como única intervención, bien como coadyuvante. En un meta-análisis llevado a cabo para estudiar la eficacia de la hipnosis utilizada como única técnica de intervención, se encontró una eficacia media para el tratamiento de los trastornos psicológicos recogidos en la CIE-10, y una baja eficacia para el uso de la hipnosis para el apoyo de procedimientos médicos. Así, la evidencia empírica más prometedora de la eficacia de la hipnosis clínica se ha encontrado, en general, cuando se utiliza como un coadyuvante a las intervenciones médicas y psicológicas.
Por tanto, los resultados permiten justificar más investigación y animar a los clínicos a incorporar la hipnosis a su práctica profesional. No se entiende la exclusión de la hipnosis de las prestaciones sanitarias en la salud pública española. Creemos que sería más sensato excluir la hipnoterapia, o aplicación de la hipnosis como única intervención clínica (por ejemplo, para curar el cáncer o trastornos donde se usan retrovirales), y aceptar la hipnosis clínica como un coadyuvante de las intervenciones médico-psicológicas. En esta línea, las actuaciones de los Programas Nacionales Salud Mental-Atención Primaria dirigidos por Mario Araña, están consiguiendo cambios en la hipnosis clínica en España que implican una serie de reajustes normativos en sociedades legas de hipnosis, alguna de las cuales está haciendo un esfuerzo importante por abandonar la hipnosis clínica incluso la hipnoterapia para adaptarse a la normativa legal vigente, y al propio sentido común (véase el comunicado del Grupo de Hipnosis Psicológica del COP-CV
). Las Sociedades Científicas, los Colegios Profesionales y las Universidades deberían participar de estas iniciativas que facilitan que la hipnosis clínica sea usada sólo por profesionales de la salud.
Finalmente, la hipnosis aplicada al campo de la salud incrementa la satisfacción del cliente/paciente, y el ahorro de tiempo y dinero, con todo lo que ello supone para la Administración Pública. Según nuestra opinión, es una cuestión deontológica informar al paciente de los beneficios que le puede reportar la hipnosis clínica, y defender su uso, dentro del ámbito de la salud pública, tal y como hacen, por ejemplo, los doctores José Sala y Antonio Castel en el Hospital Juan XXIII de Tarragona.
El artículo original puede encontrarse en la revista Papeles del Psicólogo:
Mendoza, M.E. y Capafons., A. (2009). Eficacia de la hipnosis clínica: resumen de su evidencia empírica. Papeles del Psicólogo, vol. 30, 2, 98-116.
Sobre los autores:
   
Mª Elena Mendoza es doctora en Psicología por la Universidad de Valencia. Su tesis doctoral se centró en las creencias y actitudes hacia la hipnosis de los profesionales españoles. También ha investigado sobre las aplicaciones de la hipnosis en el tratamiento del tabaquismo, en odontología y en pediatría dentro del Programa Fulbright de Intercambio Científico con los EE.UU. en la Universidad de Indiana (EE.UU.). Es autora o co-autora de publicaciones nacionales e internacionales sobre hipnosis.
Antonio Capafons, profesor titular de universidad (Universidad de Valencia). Es especialista en tratamientos cognitivo-comportamentales e hipnosis, y autor de diversas publicaciones nacionales e internacionales sobre diversos temas relacionados con la hipnosis. Actualmente, está investigando sobre evaluación y modificación de las actitudes hacia la hipnosis, así como las aplicaciones clínicas del Modelo de Valencia de Hipnosis Despierta.

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